El señor Lobo es un Ingeniero

A veces me preguntan: “¿Qué es un ingeniero?” Antes contestaba: “una persona que aplica el ingenio para resolver problemas”. A partir de ahora les responderé con otra pregunta: “¿has visto Pulp Fiction?” Un estudio pormenorizado de la secuencia del cadáver en el coche me lleva a afirmar que el señor Lobo cumple con las habilidades y las destrezas que se le requieren a un ingeniero en el trabajo. La explicación de porqué, a continuación:

1. El señor Lobo llega al lugar tras ser reclamado por el jefe para solucionar un problema. La imagen que se ve es la del jefe Marselus localizando por teléfono al señor Lobo en una fiesta. Es bien temprano (o bien tarde, según se mire) y el tío está sobrio, vestido de smoking y de una pieza. Hace las preguntas justas y necesarias para enterarse de lo que pasa y toma unos apuntes en una libretita. Inmediatamente deja cualquier cosa que estuviera haciendo y se pone en marcha. Nada más llegar, se permite unos segundos para tomar constancia de la situación.
2. Se presenta a todas las personas implicadas y corrobora la información de que dispone, completándola con los detalles adicionales. Escucha y atiende sus requerimientos y necesidades. Al mismo tiempo, observa el entorno y hace apuntes de los recursos disponibles.
3. Se hace una idea global de la situación. Medita unos instantes sobre la concatenación de actividades que lleven a la mejor solución, evitando el factor externo que arruinaría todo el proceso: la llegada de la mujer, que está al caer. El Señor Lobo, pues, ha sido arrancado de un entorno festivo, puesto a trabajar en un problema gordo del cual no tenía ningún conocimiento hasta ese momento, y tiene un límite de tiempo estricto para dar con la solución, o todo se irá a la porra.
4. Abre la boca y da órdenes precisas a cada uno de los agentes implicados, sobre lo que tienen que hacer y cómo hacerlo, explicándoles a cada uno su parte pero sin explicar el todo. Y nada de colegueos: el señor Lobo deja bien claro quién es el que está al mando.
5. Mientras todos se ponen a hacer las distintas tareas encomendadas por él, el tío se toma un café tranquilamente, “supervisando” la correcta ejecución de sus órdenes.
6. Resuelve problemas logísticos o de contingencia que van surgiendo sobre la marcha, como el de las fundas para el coche, que tiene que comprarlas al dueño de la casa bajo sutiles amenazas.
7. Reparte inteligentemente la ración de obligación/satisfacción para sus “empleados”: obliga al dueño de la casa a venderle las fundas para el coche, pero a cambio le permite disfrutar regando con agua fría a Vincent y a Jules, que están en el jardín en pelota picada. Y además le anima para reírse de ellos.
8. Hace una llamada de teléfono breve, concisa y efectiva, para arreglar el asunto de hacer desaparecer el coche, gracias a un amiguete que tiene en el sector del desguace de vehículos.

Como digo, todos estos factores me llevan a concluir que el señor Lobo es ingeniero de profesión. Pero aún hay un último detalle sublime: Cuando ha acabado la misión, ya todo está cerrado y arreglado, y el problema resuelto, el señor Lobo deja tirados a los dos pringados del Vincent y el Jules, vestidos con pantaloncitos, en un barrio que no conocen que está a tomar por c… de su próximo destino, y sin vehículo y ningún taxi a la vista, y se pira a desayunar en su cochazo con la chica. Esto me lleva a pensar que el señor Lobo no es que sea ingeniero, es que es un EXCELENTE ingeniero. Vamos, que el tío es un campeón. [Trabajo][Cine]