Residencial

Por fin parece que van a acabar la finca que están haciendo delante de mi casa. Llevo siguiendo su construcción desde que me compré el piso, no solo como miraobras, sino también de forma activa preguntando de vez en cuando a vecinos jubilados, de esos que se enteran de todo lo que se cuece en el barrio. Sí, como oís, yo soy de esos vecinos que preguntan de vez en cuando. Son las secuelas de haber crecido en una finca de solo 15 puertas con casi los mismos vecinos durante toda la vida. Hace unos meses vi pegado en las farolas unos folios con una dirección de internet, dando la bienvenida a los nuevos vecinos. Claro, en seguida, nada más subir a casa, me puse a averiguar que diablos era eso. Al parecer hay algún espabilado (lo digo en el buen sentido) que se ha montado un portalillo con foros y todo eso, para la gente a la cual les están haciendo la finca. Gracias al foro que hay ahí, aparte de las habladurías del barrio, me entero también de lo que dicen los nuevos vecinos. Y la verdad, no me gustaría estar en su pellejo. A parte de la pasta que pagarán de hipoteca (el piso está en Valencia ciudad, barrio de Patraix), tienen que aguantar los timos que les han pegado la constructora, uno detrás de otro. Si queréis, os pasáis por aquí y echáis un vistazo al foro. Es bastante graciosa la inocencia con la cual hay gente que va todavía por la vida: Les parece todo más pequeño, de peores calidades, etc. Y encima se fiaban del constructor cuando les decía cuando se lo iban a entregar, y hay gente se tuvo que ir a vivir de alquiler. Y he dicho al principio "por fin", porque la entrega de llaves era para Abril del año pasado, y ahora dicen que lo más seguro es que sea el mes que viene. A mí también me hubiese gustado comprarme un piso nuevo, pero mi economía no daba para más. Pero después de ver cosas como estas, me alegro de lo que tengo, ya que no me he llevado ninguna sorpresa. No ha habido ningún constructor que me haya toreado y/o engañado (tuve suficiente con la "sobre-valoración" del piso). Y lo malo de estas cosas, es que ni son los primeros, ni serán los últimos. Por lo menos, cuando los veo pasar andando por la calle mirando sus nuevos pisitos, tiene cara de ilusionados. Algo es algo.